La Fundación Manuel García-Pelayo ha realizado una significativa donación a la Universidad Monteávila, consistente en la biblioteca que albergaba su sede en Caracas. Esta donación representa un invaluable aporte al acervo bibliográfico de la UMA y pone a disposición de la comunidad académica una colección testimonial que refleja la amplitud de los intereses intelectuales del insigne jurista Manuel García-Pelayo y de su viuda, la destacada Dra. Graciela Soriano de García-Pelayo.
La entrega de la biblioteca se realizará en dos fases. Una primera parte, ya disponible en la Universidad Monteávila, consta de aproximadamente 6.000 títulos, desde obras clásicas a contemporáneas. Esta colección, plural y diversa, enfatiza áreas del conocimiento como Derecho, Constitucionalismo, Ciencia Política, Sociología Política y Jurídica, Filosofía, Historia y Ciencias Morales, entre las disciplinas que fueron objeto de estudio y reflexión por parte ambos académicos, orientados siempre a la comprensión y problematización sobre la legitimización del poder político y la fundamentación de la libertad individual. Una segunda parte de la donación, estimada en alrededor de 3.500 títulos, se encuentra actualmente en la residencia de la Dra. Soriano de García-Pelayo.
La Fundación Manuel García-Pelayo se constituyó hace más de tres décadas a fines de preservar, estudiar y difundir el pensamiento y la obra de su epónimo, y también promover la investigación y generación de conocimiento en círculos universitarios e intelectuales de Venezuela y el resto de Iberoamérica.
Nacido en Zamora, España (1909), y autor de la obra referencial Derecho constitucional comparado, Manuel García-Pelayo fue una figura fundamental del pensamiento jurídico y político del siglo XX. Doctor en Derecho por la Universidad de Madrid, amplió sus estudios en las Universidades de Viena y Berlín. Combatió en la guerra civil española desde el ejército popular y fue confinado en campos de concentración de Albatera y Porta Coeli y cárceles de Gandía y Madrid. Exiliado a Argentina en 1951, ejerció como catedrático en la Universidad de Puerto Rico desde 1954.
Fue llamado por la Universidad Central de Venezuela en 1958 para crear el Instituto de Estudios Políticos, al cual dirigió hasta su jubilación en 1979. Durante la transición de España hacia la democracia, García-Pelayo fue magistrado y a continuación el primer presidente del Tribunal Constitucional. Cumplidas esas funciones, regresó a Caracas junto a su esposa, donde falleció en 1991.
Historiadora, doctora en Ciencias Políticas y profesora titular jubilada de la Universidad Central de Venezuela, Graciela Soriano de García-Pelayo, creadora y presidente de la Fundación que hoy dona la biblioteca de su sede caraqueña a la UMA, es una académica rigurosa y prolífica cuya teoría del desarrollo discrónico ha contribuido al abordaje estructurado y no convencional de fenómenos políticos complejos.
La donación de la biblioteca de su sede en Caracas a la Universidad Monteávila constituye una significativa iniciativa de la Fundación. Se trata de una colección fuera de serie, nutrida por la indagación y el cruce entre teoría y realidades que desgarran lo que García-Pelayo refirió como la coexistencia entre la irracionalidad global y las rigurosas racionalidades instrumentales para objetivos definidos, a su vez animados por motivaciones irracionales ávidas de falseamiento y relativismo que se han legitimado, a lo largo de la historia, por la promesa de una supuesta comunidad ideal.
Este legado bibliográfico es un valioso patrimonio intelectual que desde la UMA se encuentra a disposición de estudiantes, profesores e investigadores, como aporte al enriquecimiento del debate académico y la formación de nuevas generaciones de pensadores.
Texto: Prof. Carolina Guerrero