Atravesando el parque nacional Henri Pittier y haciendo un viaje en peñero se puede encontrar un pueblo famoso por su cacao, el ritmo de sus tambores y su amabilidad. Su nombre es Chuao. La Universidad Monteávila, en conjunto con el Centro Médico de Caracas, Rodando en Familia por Venezuela, Cacaoni Lodge, Grupo LETI, Digisalud, Digitel, Helados Fragolate, Eveba y Cuadro forma parte de un operativo integral multidisciplinario para apoyar a la comunidad y atender sus necesidades.
Anabella Guzmán, directora de Rodando en Familia por Venezuela, contó que el operativo nació tras su visita a Chuao hace un par de años, en la que se encontró con un panorama de pobreza pero mucha disposición en “la maravilla de su gente”. “Nos hace tener un compromiso social como entidades privadas”, afirmó.
El Dr. Carlos Eduardo Marcano, pediatra y neonatólogo del Centro Médico de Caracas, explicó durante la presentación de resultados del operativo que el proyecto abarca los ámbitos de lo médico, educativo, social y económico.
De igual forma, señaló que Chuao tiene la peculiaridad de ser una locación con un acceso complicado por ser “básicamente propiedad marítima”, lo que a su vez dificulta el acceso a especialistas en servicios de salud. Además, sólo cuenta con un ambulatorio.
Por ello, la primera fase del proyecto implicó brindar atención médica sanitaria a la población. El doctor detalló que tras un levantamiento previo se determinó el tipo de especialistas requeridos para atender a la comunidad.
De acuerdo con los datos recopilados por Digisalud durante el operativo, hubo un total de 438 personas atendidas, de las cuales el 62% son mujeres. En promedio, cada persona recibió dos atenciones. Así mismo, se entregaron 1014 tratamientos en todo el proceso. Entre todas las causas de atención, la nutrición fue la más solicitada.
Para la segunda fase del proyecto, se busca establecer la conectividad dentro de Chuao para asegurar la sustentabilidad del operativo. Desde la Universidad Monteávila y el Centro de Estudios para la Promoción de la Salud, desarrollaremos planes educativos con programas de salud para su aplicación a distancia.
En esta misma fase se incluirá la telemedicina gracias a la teleeducación, en tanto que el médico del pueblo pueda realizar las consultas a especialistas desde Chuao en los casos que lo requieran.
La tercera fase del proyecto apunta al desarrollo de la economía local de Chuao. El doctor Marcano indicó que es allí donde los patrocinantes entran en juego, pues son capaces de involucrarse en la esfera económica del pueblo. Este es el caso de Helados Fragolate, que enseñará a los habitantes de Chuao a elaborar helados de calidad. Así mismo, dado que Chuao es un pueblo pesquero y cacaotero, podrán vender a la heladería chocolate y cacao.
La última arista del proyecto está referida al aspecto turístico, ya que según el doctor Marcano, al presentar el proyecto a diferentes empresas se resaltan las bondades de Chuao como destino.
El doctor Alejandro Rísquez, pediatra y epidemiólogo, compartió algunas conclusiones en torno al proyecto. “El verdadero riesgo existe en cómo atender las emergencias”, aseveró. “Lamentablemente es una población muy empobrecida. Creo que una respuesta está dentro de la teleeducación, el desarrollar emprendimientos y herramientas, y el desarrollar la belleza que está a los ojos de todos”, continuó.
Gerardo Fernández, presidente del Consejo de Desarrollo Científico, Humanístico y Tecnológico de la Monteávila, dirigió unas palabras de agradecimiento y reconocimiento a todos los colaboradores y miembros del proyecto.
“Cuando nos damos de esta manera y vemos el impacto que tiene en los demás, nos recordamos a nosotros mismos que somos parte de algo mucho más grande que nosotros y que nuestras acciones sí marcan la diferencia”, comentó. “Nos permite trascender. Fortalecer nuestros propósitos”, agregó.