La décima novena edición del Premio Mujer Analítica 2025 se realizó para celebrar y honrar la fuerza, la inteligencia y el compromiso de las mujeres venezolanas que trabajan día a día para construir una sociedad más justa en cada ámbito en el que se desenvuelven.La Asociación Civil Mujer y Ciudadanía y la Universidad Monteávila han sido pilares de esta iniciativa. Creada hace 18 años, este galardón se ha consolidado como un símbolo de reconocimiento al liderazgo femenino que impulsa proyectos sociales, carreras profesionales y actividades donde se destacan mujeres activas, críticas, reflexivas y modernas.
El rector de la Universidad Monteávila, Guillermo Fariñas Contreras, abrió el evento con un discurso en el que destacó el ejemplo de dos mujeres propuestas por la Iglesia como modelos de vocación al trabajo, al servicio de la sociedad y a la vida en familia.
La primera de ellas, la Santa Madre Carmen Rendiles, fue recordada por su fe y su voluntad inquebrantable para superar no solo su discapacidad física, sino también las dificultades que enfrentó a lo largo de su vida. Para el rector, su testimonio es un símbolo de que el amor y el trabajo, cuando se realizan con el corazón, pueden dar frutos extraordinarios. Fariñas subrayó que el principal apostolado de la Madre Carmen fue la educación, fundando colegios y escuelas dedicadas a la formación humana, moral y espiritual de niños y jóvenes, convencida de que educar era el camino más directo para transformar la sociedad.
El segundo ejemplo presentado fue el de Ruth Pakaluk, una mujer que pasó de ser atea y defensora del aborto a convertirse en una destacada promotora de la vida en Estados Unidos. Su conversión al catolicismo y su experiencia como madre de siete hijos la llevaron a un intenso activismo público, participando en debates y organizando la oposición a programas que consideraba peligrosos para la vida y la moralidad. A pesar de su formación académica de élite, defendió con firmeza su vocación de madre y ama de casa, combinando la vida familiar con una activa presencia en la esfera pública. Actualmente, su proceso de canonización está abierto en la Iglesia.
Para el rector de la Monteávila, ambas mujeres representan también un modelo de compromiso silencioso pero necesario. Santa Madre Carmen, Ruth Pakaluk y otras figuras similares proponen un camino en el que hombres y mujeres se encuentran y manifiestan su compromiso con la sociedad.“Ellas se esforzaron por la educación de las mujeres para que pudieran asumir obligaciones privadas y públicas, porque creían que sus deberes realmente no se centraban en estructuras. Algo que la modernidad no deja. Las obligaciones no son restricciones, sino que ayudan a dar sentido y conexión a nuestras vidas”, expresó Fariñas.
En esta edición se entregaron reconocimientos a mujeres de diversas áreas como la educación, comunicación, biología, arquitectura, derecho reflejando la diversidad y riqueza del liderazgo femenino venezolano.
Entre las mujeres reconocidas se encuentran Virginia Domínguez, decana de la Facultad de Ciencias de la Educación, y Alejandra Otero, egresada de la Universidad Monteávila.
El Premio Mujer Analítica se otorgó a Zonia Atencio, presidenta de Grupo Zoom, en reconocimiento a su gran aporte como empresaria y a su compromiso con el desarrollo del país. El galardón resaltó además su rol como madre, empresaria y gerente, ejemplo de liderazgo integral que combina la vida familiar con la responsabilidad corporativa y el servicio a la sociedad.
Por último el Reconocimiento Mujer Analítica 2025 en honor al Dr. Román José Duque Corredor se entregó al Dr. Gerardo Fernández, vicerrector académico y presidente del Consejo de Desarrollo Científico Humanístico y Tecnológico de la Universidad Monteávila.
Por otro lado también se entregó el Premio Evangelina García Prince, creado en honor a la socióloga y antropóloga venezolana, defensora de los derechos humanos y pionera en políticas públicas de igualdad de género. Este año se entregó al Centro de Estudios de la Mujer de la Universidad Central de Venezuela, institución clave en la promoción de la equidad y los derechos de las mujeres.Mujer Analítica nació con la visión de asumir la participación ciudadana con valentía y pasión. Su ejemplo busca multiplicarse en todo el país y más allá de nuestras fronteras. Durante la ceremonia, se resaltó que reconocer y premiar la verdadera potencia del liderazgo femenino es ir más allá de consignas, es valorar hechos concretos, logros palpables y transformaciones que impactan comunidades enteras.