Los inicios del Centro de Estudios para la Participación Ciudadana se remontan a los orígenes de la propia universidad. Como explica su actual director, Juan Carlos Vidal, la Monteávila está en las comunidades desde el principio, hace más de 20 años.
“Creo que (el centro) es parte de su esencia. Cuando las autoridades fundadoras pensaron en la universidad, la pensaron no sólo como una institución de excelencia académica, sino como un centro de formación de buenas personas. Nosotros no sólo graduamos buenos abogados, buenos administradores, buenos docentes o buenos comunicadores sociales. Graduamos buenas personas”, aseveró el director. “Dentro de ese fin es necesario el ingrediente de la participación ciudadana porque al participar de manera ciudadana te haces más empático”, continuó.
Vidal está convencido de que “hay que involucrarse, ir a la calle, hacerse parte de las soluciones prácticas también, no sólo teóricas en un salón de clase”, afirmó. “Yo estoy aquí para ayudar a la universidad a cotidianizarse con los ciudadanos”, agregó Vidal, quien también tiene amplia experiencia resolviendo problemas y ejecutando políticas públicas en los 2000 barrios de la parroquia Petare y las parroquias populares del municipio Sucre.
La Fundación Konrad Adenauer, la Embajada de la República Federal de Alemania, Mujer y Ciudadanía y Paz Activa son algunas de las instituciones aliadas del Centro de Estudios para la Participación Ciudadana.
Con la Asociación Civil Mujer y Ciudadanía el centro se ha dedicado a la formación de mujeres como agentes de cambio, promoviendo su empoderamiento y otorgándole herramientas para que mejoren su liderazgo.
Por otro lado, con la organización Paz Activa se ha desarrollado un programa de mediación y resolución de conflictos para garantizar derechos, el cual facilita la posibilidad de solucionar problemas de manera rápida y sin necesidad de acudir a un juez o tribunal.
En conjunto con la Fundación Konrad Adenauer se ha apoyado en la educación, participación ciudadana y sufragio, que en palabras del director del centro se realiza “entendiendo al voto como mecanismo civilizado y pacífico de solución de problemas”.
“El rector fundador Enrique Pérez-Olivares decía que todos los cambios positivos de la sociedad, los políticos, económicos, culturales, incluso los cambios más pequeños se logran a través de la participación de la gente”, expresó Vidal. “Tú puedes crear una ley, pero si no tiene respaldo ciudadano o popular queda como letra muerta”, añadió a modo de ejemplo.
Así mismo, la formación en justicia universal es realizada por el centro en alianza con la Embajada de la República Federal de Alemania.
Con los alumnos de pregrado, el Centro de Estudios para la Participación Ciudadana lleva a cabo diferentes programas a través del servicio comunitario de las distintas facultades de la universidad. Vidal detalló que junto a los estudiantes se han visitado sectores populares de Petare y barrios como San Blas, La Lucha y La Cauchera, ofreciendo asesorías jurídicas y en materia de protección del niño, niña y adolescente, así como programas de mejoramiento de lectura y habilidad numérica.
Para el director, el centro es diverso, integral, cree en la gente y busca poner su granito de arena para que la universidad pueda prestar grandes servicios a la sociedad. “Como nos dice el rector, Guillermo Fariñas Contreras, la universidad está para ofrecer conocimientos, brindar saberes que permitan a la sociedad solucionar esos problemas”, indicó.
“Queremos llegar más allá del área metropolitana de Caracas. Tenemos proyectos que estamos elaborando para acercarnos a comunidades donde las universidades no llegan”, afirmó Vidal.
Sobre la participación ciudadana en sí, Vidal expuso que se trata de un compromiso colectivo por alcanzar anhelos y lograr cambios en positivo, un ejercicio común importante para alcanzar el bien de la humanidad. Desea que se convierta en un sueño de toda la comunidad universitaria y reitera que la Monteávila te da las herramientas espirituales, éticas y académicas para que puedas poner en práctica una mejor ciudadanía.
El Centro de Estudios para la Participación Ciudadana se encuentra activo en el segundo piso del Edificio de Biblioteca y tiene las puertas abiertas para todos. “El único requisito para ser parte de la participación ciudadana es respetar las ideas de los demás”, mencionó su director.
